El famoso parque turístico de Monteverde, «El Tigre Waterfalls», se vio sorprendido este fin de semana por una visita inesperada de un “ladrón” bastante inusual. Lo que parecía ser un acto de vandalismo por parte de humanos resultó ser obra de un animal: una martilla hambrienta que decidió irrumpir en el lugar para robar un racimo de bananos.
La travesura de la martilla: Un susto para el guarda de seguridad
El robo inesperado
El incidente ocurrió en la noche, cuando Odilier, el guarda de seguridad del lugar, escuchó ruidos extraños provenientes del techo. Intrigado por el sonido, decidió investigar. Fue entonces cuando vio una escena sorprendente: una martilla, un mamífero nocturno que habita la selva tropical, estaba perforando el techo del establecimiento para llegar a un racimo de bananos.
El guarda logró grabar el momento exacto en que el animal rompía una lámina del techo con sus garras, dejando una huella de su incursión. Según Raúl Fernández, socio del parque, este no es el primer encuentro con la martilla, que ha sido vista rondando el área en busca de comida.
Un encuentro curioso
Las martillas son animales nocturnos que, generalmente, se mantienen en las copas de los árboles. Su dieta consiste mayormente en frutas, y parece que los bananos del parque resultaron ser un manjar irresistible para este curioso visitante. Aunque es común que estos animales interactúen con el entorno, nunca antes se había documentado un robo tan audaz en un espacio turístico.
Características de la martilla: Un “ladrón” de la naturaleza
Un mamífero fascinante
La martilla, también conocida como «tapir de pico», es un mamífero pequeño que habita en la selva tropical. Su comportamiento es principalmente nocturno, lo que dificulta su observación durante el día. Este animal es conocido por su agilidad para treparse a los árboles y su apetito por una variedad de frutas, lo que lo convierte en un visitante frecuente de cultivos y huertos en las zonas selváticas.
Su capacidad para adaptarse al entorno y la curiosidad que demuestra en busca de alimentos lo han convertido en un habitante particular de los ecosistemas tropicales, en donde su presencia es tanto fascinante como sorprendente para los seres humanos.
